domingo, 7 de octubre de 2012

Déjame acariciarte solo otro poquito



Déjame acariciarte una vez más; acariciarte con los ojos, y con los labios, acariciarte con mi voz, acariciarte con susurros; déjame pasar mis manos porque tu piel es ungüento  y tu saliva sedante. Porque en tu cuerpo me vuelvo chiquito, y me pierdo; aveces te encuentro, cuando tus ojos miran mis ojos, y pruebo tu boca sincera; me doy cuenta de que te pertenezco, que mi lecho son tus piernas, y tu panza, y tu pecho.

     Déjame acariciarte una vez más, marcarte incandescente en la memoria, tatuarme tu aroma, déjame recorrer tu piel desnuda, transcribirla en mi cabeza, moldearme la manos en tu figura; déjame acariciar tu nuca, tus mejillas, rozar mis dedos. Aprehenderme tus sabores, prenderme de tus pies.

     Déjame acariciar tu cuerpo, volverme chiquito, pequeño, diminuto, saltar entre tus pestañas, acurrucarme en tu sonrisa, embriagarme en tu boca, pasar desapercibido,  susurrarte al oído como ángel y diablito, decirte que me amas, decirte que no es cierto. Convencerte que me amas, entrar por tus orejas, alojarme en una idea, volverme un pensamiento, convertirme en sentimiento y apretarte el corazón, hicharlo de cariño, escribirte en sus paredes y con tu propia tinta, planas de "te amo, te amo, te amo", contagiarte de pasiones, revivir esos recuerdos.

     Déjame acariciarte otro momento, erizar tu piel, sacarte tus cosquillas. Déjame mirarte a los ojos, y verme reflejado con sincero sentimiento ¡Espérame! no me tires, aún no acabo, me falta acariciarte; no me cortes de tus uñas, no me quites de tus vellos; deja que me esconda en los pliegues de tus pies, haz como que me he ido, pero déjame tocarte, escalar hasta tu cima... Afortunadamente no tallas bien tus codos, déjame subir, llegar nuevamente a tu rostro, volverme más pequeño, microscópico, para que me inhales en un suspiro, y me exhales en "Te amo". Y si todo falla, déjame acariciarte solo otro poquito.


Para mi Hada Azul

sábado, 6 de octubre de 2012

Variaciones del desamor



Ayer abrí mi pecho y te dejé ver mi corazón
¿¡qué más daño podrías hacerle!?
Se me escapó una que otra lágrima
y enteras confesiones
Supongo que así es esto
Vas muriendo poco a poco
Te desgastas, te vacías, y cuando no hay nada más
Terminas de quebrarte.
Sin embargo me pasa algo raro
Una especie de propensión al masoquismo
me vacío, y luego me llenas de recuerdos
¿O es que acaso quieres que me quiebre muchas veces?
Ayer te intenté escribir, y se me escaparon muchas letras
pero no tenían sentido, formaban palabras y estas, oraciones
pero no tenían sentido.
Me di cuenta de que no había ninguna razón ya
y de que quizá no había realmente nada
Solo tinta que exprimo de mis dedos
pero no hay nada, solo trazos sin sentido
mas no quiero entregarme a eso
y me agarro con uñas y dientes a recuerdos
porque realmente fueron buenos, y fueron muchos
recorrimos caminos, sorteamos distancias
jugamos como niños, reímos, lloramos y de seguro nos amamos
Me queda una casa vacía
una cajetilla de cigarros,
y libros, muchos libros;
tus fotos nos las quiero
y tu ropa menos; aún hay en ellas tus rastros
Pero qué lugar que no he pasado contigo
tantas calles, tantos lugares
hasta los dulces me recuerdan a ti
y los juegos tienen tu nombre.
Mi sueño también tiene tu nombre
se fue con tus ronquidos
Las cenas, saben a tu risa
 y en el cielo de la noche te veo menguando
sin esperanza de que crescas.
Miro mi correo a la espera del mensaje que no llega
y el teléfono solo timbra tu silencio.
Mi cabeza entonces se pone censata,
me dice "qué´mal escribo"
pero lo peor es cuando habla
diciendo que escribirte no cambia nada

viernes, 5 de octubre de 2012

En serio, yo te extraño



En serio te extraño, no es solo de dientes para afuera, también es de dientes para adentro, te extraño en la panza y en el pecho. Te extraño en mi piel, en mis labios, en mis ojos, te extraño en mi nariz y en mis oídos. Sí, lo sé, quieres tiempo, necesitas tiempo.Pero es que en verdad, yo te extraño tanto. Te extraño por las noches, aunque estuvieras en otro cuarto y en otra cama, extraño escuchar tus ronquidos, porque tus ronquidos significaban presencia, ahora solo hay música, pero está vacía, porque el lugar lo llenabas tú. No quiero mandarte ningún mensaje, ni alterar tus pensamientos; pero no puedo evitar escribir en la nada esperando, esperanzado, que quizá encuentres estas letras, y te acuerdes de que te extraño, y que te acuerdes que te amo, y quizá con ese recuerdo, también recuerdes que me amas; quizá es mucha esperanza, quizá espero mucho. Y me caga, porque siempre he odiado a la esperanza, que suena a espera, pero no puedo quedarme esperando, y por eso te escribo, pienso que por azares te des una vuelta por mis letras, y te columpies un rato en alguna U que te llame la atención, y después te llame la atención otra letra, y así, hasta que sean las palabras, y después las oraciones, que te des cuenta como gritan tu nombre y tu ausencia, y entonces te acuerdes que te extraño, para que así quizá recuerdes que me extrañas...

jueves, 4 de octubre de 2012

Carta de despedida

Yo sí te voy a extrañar mucho, mucho, mucho, muchísimo. Sé que nada será lo mismo sin ti. ¿Recuerdas tantas cosas que ahora solo serán recuerdos? El juego de los mostos, las voces chillonas, las micro cachetadas, las peleas de almohadas, ¿recuerdas los salibazos?, las prendas volando de una cama a otra intentando darnos en la cara, ¿recuerdas el 1,2,3 me debes un chocolate?, la fascinación por los dulces como si fuéramos niños chiquitos, las películas, los desvelos viendo series, ánimes ¿Recuerdas lo problemático de encontrar dónde cenar los domingos, o el "tú no cagas rosas"?, los granitos, los masajes, el café, las cenas. Yo recuerdo, el "do-do-do", y el "tdi-tdi-tdi", también el "didita-didi" diditeando la canción de Feel de Robbie Williams. Neta yo voy a extrañar tantas cosas, porque dentro de todo nos la pasábamos poca madre. Jugábamos, reíamos, disfrutábamos de la vida, nos íbamos de viaje. Nos preocupábamos uno por el otro cuando estábamos enfermos, y jugábamos "safo" para ver quién apagaba la luz. Nos enojábamos mucho también, pero eso ¿realmente importa?, en realidad salvo el porqué esto terminó, no me acuerdo de esas cosas que nos hacían enojarnos. Lamento no haber tenido palabras para confirmarte que mis oídos siempre te estaban escuchando (porque en serio, te escuchaba)..., y lamento que tantas veces llegaras tarde a tus trabajos porque te abrazaba en la cama para estar más tiempo contigo, pero a mi favor tengo el que te levanté más veces de las que te hice quedarte; lamento también no haberte podido dar más, porque no tenía,  pero si hubieras necesitado una donación de apéndice, yo te hubiera dado el mío; siento haberme preocupado tanto por ti, y porque fueras libre que parecía que no me importabas. Pero me importabas, realmente me importabas, tanto como para preferirte gordita que mal pasada. Neta yo sí te voy a extrañar tanto, como no te imaginas, tú estarás distraída con tus cosas, apenas notarás mi ausencia, yo la he notado desde hace muchos días. También lamento que no haya podido hacer mis problemas a un lado las últimas semanas, pero en serio, fue muy fuerte la defunción de mi tío, lamento haberte enseñado solo ortografía porque no supe correctamente la gramática. En serio, lamento no haberte dado nada más, pero la verdad es que no tenía... o quizá sí, pero nunca supe que lo necesitaras.

Ahora sé que te irás, entre aplausos y nuevos amigos, entre proyectos y un enorme crecimiento, y me irás dejando atrás. Muy bien, pero al menos sé que hice lo que pude, y quizá más, o quizá menos, pero lo hice... me puedo dejar, sin reprocharme, ver como te vas pues lo hice. Y ahora, solo ahora, después de tantas cosas, puedo decir ciertamente que te amé.Segura y ciertamente: Te amé.

Pd. Te llevas contigo, a Mar, al mosto y a Gogo-Goguito,
Yyo tanto que te amé, tanto tanto tanto, y tú nunca me creíste, lo dudabas, pero te lo demostraba, lo hacía, eras incapaz de darte cuenta, te lo dije, negabas que fuera cierto. Sin embargo me pediste que confiara, pues tú también decías que me amabas, que me querías, me ilusionaste, me dijiste que me amabas, y yo te creí, confié en ti, y como era obvio, fui engañado. Jajaja, lo peor es que no hay forma de solucionarlo, no existe, no hay nada, no puedes hacer lo que es necesario, si lo hicieras de igual forma terminarías odiándome, y suficiente con el odio que tengo yo hacia ti. Pero no te importó, yo cambié, cambié como no había cambiado por nadie, te era fiel, eras la única, y te contaba los que hacía para que vieras que no hacía nada, y tú me prometiste que no hacías nada, que todo eran ociosas divagaciones mías, tonterías. Pero el tonto fui yo, te creí, me fallaste, me fallaste en los momentos que más te necesitaba, me fallaste en el momento preciso donde no me tenías que fallar, y me mentiste, y me mataste, me dejaste abandonado, completamente abandonado. Dejaste en mí enojo, quizá odio, rabia, furia, tristeza. Ahora entiendo tantas negativas a que te acompañara, a que fuera contigo. No es que no te dejaran, sencillamente no me querías a tu lado, y ahora yo estoy solo, solo como sabía que lo estaba, y más solo todavía, porque me has dejado sin ti, sin tu compañía que era tan preciada. Qué tonto, qué ingenuo, te creía, tanto, tanto, y todo fue mentira, o verdades a medias... qué tonto, qué idiota, qué ironía, dejar de hacer lo que hacía para que me lo hicieras tú...

Hasta nunca amor mío.

miércoles, 3 de octubre de 2012

Si alguna vez te di algo, recuerda que fueron caricias
(Que no se pueden cambiar)
recuerdan que fueron besos
(que no se puede regresa)
Recuerda que fue tiempo
(que ya se fue)
Recuerda que fueron tantas cosas
(que ahora solo puedes recordar)